Son muchas las causas que pueden llevarnos a sentir cansancio y debilidad. Entre ellas están la falta de descanso, el dolor crónico, la depresión o, incluso, el déficit de nutrientes. Entonces, lo primero es identificar el motivo y, acto seguido, intentar poner solución. En el artículo de hoy, te hablamos de una de las causas que podrían estar ocasionando esa fatiga que sientes: la deficiencia de vitamina B12. Vamos a explorar en detalle este escenario.

Síntomas de la falta de vitamina B12

La vitamina B12 es un nutriente vital para el organismo, pues interviene en numerosos procesos y funciones. Por ejemplo, esta vitamina contribuye al funcionamiento del sistema nervioso, crucial para aspectos de nuestra existencia tan básicos como pensar o moverse. Pero también la vitamina B12 apoya la función psicológica y ayuda al funcionamiento del sistema inmunológico.

Por todas estas propiedades es, de hecho, una de las vitaminas que no pueden faltar en tu alimentación, pues, de lo contrario, podrías experimentar algunos de los siguientes síntomas.

• Sentir fatiga y cansancio constantes. La vitamina B12 contribuye a la formación normal de glóbulos rojos, de acuerdo con la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA). Una menor producción de glóbulos rojos que transportan oxígeno, que podría venir causada por un déficit de B12, puede ocasionar que te sientas más cansado que habitualmente e, incluso, que llegues a sufrir mareos.
• Enfermar con facilidad. La vitamina B12 favorece las defensas naturales, lo que significa que contribuye a tener un sistema inmunológico más fuerte. Pero si no suministras a tu cuerpo la dosis recomendada, este escudo protector dejará de hacer su función y serás más propenso a sufrir infecciones.
• Experimentar cansancio y lentitud mental. Otra de las funciones de la vitamina B12 es apoyar la salud cerebral. Dado que este nutriente favorece las habilidades cognitivas como la concentración y la memoria, si falta en tu dieta, no tardarás en experimentar cierto cansancio mental que te complicaría abordar tus obligaciones.

Vitamina B12, tu pasaporte hacia la energía

Uno de los signos más característicos de que, efectivamente, tienes deficiencia de vitamina B12 es, como hemos visto, sentirte cansado todo el tiempo. La buena noticia es que esto puede paliarse incluyendo alimentos ricos en este nutriente, pues una de las cualidades de la B12 es precisamente que ayuda a reducir el cansancio y la fatiga.

Los expertos recomiendan un aporte diario de aproximadamente 4 mcg de vitamina B12 en el caso de adultos, que puede adquirirse fácilmente si te aseguras de incorporar alimentos como pescados (sardinas, trucha, etc.), carne de vacuno, huevos o lácteos en tu dieta. Las fuentes más potentes de vitamina B12 son sobre todo alimentos de origen animal, por lo que si sigues un estilo de vida vegetariano o vegano, lo indicado para ti serían los suplementos de vitamina B12, que hoy en día pueden encontrarse libres de ingredientes animales.

Sea a través de la alimentación o de complementos, asegúrate de incluir este nutriente en tu día a día para que nada te separe de sentirte enérgico y con ganas de comerte el mundo.